jueves, 5 de agosto de 2010

Doctor Willliam Gull: Sospechoso de ser Jack el Destripador

Doctor en medicina (y Sir)
William Withey Gull.

Acusado de haber sido Jack el Destripador, según la teoría de la conspiración "monárquico-masónica"



Las dos pasiones en la vida del Dr. William Withey Gull eran la monarquía británica y la orden masónica, y aquellos que lo conocían a fondo sabían que haría todo cuanto fuese preciso en salvaguarda de estas instituciones. Con la ayuda de un cochero de carruajes llamado John Charles Netley, quien otrora se había encargado de trasladar al Príncipe "Eddy" - Albert Víctor-, pondría manos a la obra en su sanguinaria labor finiquitadota.
¿El móvil de Gull el Destripador? Su creciente insanía producto de un accidente cerebral y cardíaco sufrido en el año 1887, el cual le generaría alucinaciones tan graves como para hacerle creer que al mutilar ceremonialmente a aquellas mujeres que veía como enemigas estaba cumpliendo con su ineludible deber de estricto masón.
Las chantajistas ( las víctimas: Polly Nichols, Annie Chapman, Liz Stride y Mary Kelly) se convertirían en su mente en los "Juwes";o sea en Jubela, Jubelo y Jubelum, quienes fueran los traicioneros discípulos que brutalmente asesinaron a Hirán Abiff, fundador de esa sociedad secreta. La venganza contra éstos traidores se habría llevado a cabo mediante furibundos rituales a través de los cuales los acólitos del difunto Abiff acabaron con los matadores de su idolatrado líder. El Dr. Gull fungiendo en su rol de vengador haría lo mismo sobre las cuatro meretrices alineadas contra la monarquía inglesa.
Pero conforme con esta proposición, Sir William, aunque severamente desquiciado, poco hubiera podido hacer para transformarse en un Destripador impune si no hubiese contado con el entusiasta auxilio prestado por las autoridades más allegadas a la Corona y, en especial, por los jerarcas de máximo rango en la órden masónica de ese entonces.
Dentro de tales jerarcas Stephen Knigth (escritor que fue el primero en postular la "teoría de la conspiración") propone al General Charles Warren y al Doctor Robert Anderson. De este modo, resultarían masones implicados en la sórdida tapadera nada menos que el jefe de mayor grado dentro de Scotland Yard en esa época y su inmediato segundo, los cuales dominaban la jurisdicción inherente a la Policía Metropolitana que abarcaba a todo el Reino Unido, excepto un minúsculo sector de la capital británica a cargo de la llamada "Policía de la City de Londres".
Conforme pretende la hipótesis de la "conjura imperial", en la mente afiebrada de este candidato a ser Jack el Destripador se trasuntaba un imperioso deseo de que el mundo supiera cuál era el castigo que le aguardaba a las pérfidas prostitutas (que supuestamente chantajearon a la Corona inglesa), y a todos quienes osaran poner en riesgo a las sagradas instituciones de la monarquía y -por extensión-de la masonería.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por comunicarse con Gabriel Pombo.